Las gas-lineras, un negocio al alza

El gas licuado (derivado del petróleo) o autogás se está convirtiendo en un combustible cada vez más demandado en la provincia por conductores que se fijan en su precio, entre un 40% y un 60% más económico, y que, de paso, es menos contaminante. Una demanda que atienden las gas-lineras, un negocio al alza con 24 estaciones de servicio en toda la provincia que dispensan gas licuado, a la cabeza de la Comunidad Valenciana: en la de Valencia hay 19 por solo 5 en Castellón, según la Federación Mediterránea de Gasolineras.

Una de las pioneras en el «coche limpio» fue Petro Alacant, en la avenida de Orihuela de Alicante, que hace cuatro años introdujo el dispensador de autogás (cuyas siglas son GLP), que se diferencia de los de gasolina y gasóleo en su forma, una especie de embudo. La gasolinera de Cepsa en La Goteta lo incorporó hace un año. Sus empleados explican que cada vez más conductores utilizan este combustible «porque es más barato». Lo cifraron en «tres ó cuatro» de cada diez.

La gran mayoría de estaciones de servicio que dispensan gas licuado en la provincia son propiedad o están abanderadas por Repsol, indica la Federación Mediterránea de Gasolineras, que añade que en la provincia de Alicante empiezan a introducirse los surtidores de gas natural comprimido (GNC), más enfocado a vehículos ligeros y furgonetas, y los de gas licuado natural (GNL), para los camiones de largo recorrido. Los dos son aún menos contaminantes que el autogás, derivado del petróleo: reducen en más del 85% las emisiones de óxido de nitrógeno y partículas a la atmósfera, principales contaminantes urbanos, lo que ayuda a mejorar la calidad del aire de las ciudades. «Los vehículos de gasolina y de gasóleo se pueden transformar para el combustible gas llevándolos al taller. Aún no hay ‘electrolineras’ que permitan recargar de forma rápida los coches eléctricos así que el sector busca alternativas más limpias», señala la Federación.

¿Compensa convertir un motor de gasolina a uno de gas? El coste es de unos 2.000 euros, pero, al ser más barato el combustible, se calcula que la amortización del sistema de alimentación se produce en 25.000 kilómetros. Además, hay una larga de lista de coches que se pueden comprar en España con sistema bi-fuel de fábrica, es decir, que pueden funcionar con gasolina o gas. Y de todos los precios.

La autonomía, eso sí, de los coches con gas es algo menor al ser algo más pequeños los depósitos, unos 35 litros de media frente a los entre 50 y 70 litros que puede albergar un depósito de gasolina o gasóleo, como explica el presidente de la Asociación Radioteletaxi Alicante, Ignacio Picó. Eso no le quita demanda, como tampoco decrece la de los coches híbridos de gasolina y eléctricos, que se cargan con el movimiento del vehículo. Todo esto contribuye a que Alicante y Elche formen parten del ránking de los municipios con «coches más limpios», ya que suman más de 26.000 circulando con motores que utilizan combustibles no fósiles, según el estudio «¿Cómo se mueve tu coche?» realizado por la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (Unespa). Lo mismo ocurre en municipios turísticos como Dénia, Xàbia y Torrevieja gracias al alquiler de vehículos.

Fuente: diarioinformacion.com