El Gobierno aprueba el Plan PIVE 7
El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes la séptima edición del Plan PIVE, de incentivo a la compra de automóviles nuevos a cambio de achatarrar uno antiguo, con una dotación presupuestaria de 175 millones de euros y que cuenta con sensibles modificaciones en comparación con los programas anteriores.
En la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, indicó que la decisión de aprobar el PIVE 7 se produce después de la buena acogida experimentada por los consumidores y por su efecto positivo sobre la economía y el medio ambiente.
Sáenz de Santamaría apuntó que la dotación total será de 175 millones de euros, aunque recordó que la extensión de la anterior edición del Plan permitía que se realizaran reservas con cargo a la recién aprobada. Según informaron fuentes del sector a Europa Press, a día de hoy quedan disponibles alrededor de 30 millones de euros del presupuesto total.
Los beneficiarios de estas ayudas serán particulares, autónomos, microempresas y pymes y las características principales son las mismas que las de versiones anteriores, aunque incluye diferentes modificaciones.
El primero de estos cambios es la obligatoriedad de que el beneficiario de las ayudas tenga la titularidad del coche a achatarrar durante al menos el año anterior a la compra del automóvil nuevo. La segunda modificación contempla que el coche que se retira tendrá que tener la ITV vigente a la entrada en vigor del Real Decreto.
El importe de las ayudas se mantiene sin variación, de forma que el Gobierno aportará 1.000 euros a la compra de un coche nuevo y 1.500 euros en el caso de que sea un vehículo de más de cinco plazas por parte de familias numerosas o para discapacitados. Estas cuantías se deben al menos igualar por parte de los fabricantes.
La vicepresidenta del Gobierno apuntó que en todas sus ediciones el PIVE ha permitido la sustitución de 715.000 vehículos antiguos por otros nuevos y la previsión es que con el nuevo PIVE se alcancen los 900.000 vehículos. Esta medida también ha logrado un ahorro de 248 millones de litros de combustible al año.
Además, todas las ediciones puestas en marcha de este programa hasta la fecha han logrado una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero de 513.000 toneladas de dióxido de carbono (CO2) al año.
El Gobierno destaca que ha demostrado ser una importante herramienta para activar el mercado español de vehículos nuevos, ya que cerca del 75% del presupuesto disponible para la séptima edición ya está comprometido antes de su entrada en vigor.
Vehículos
Los vehículos susceptibles de recibir las ayudas a la compra son convencionales, híbridos, híbridos enchufables y eléctricos de autonomía extendida que tengan certificación A o B en la base de datos del IDAE, así como eléctricos puros o propulsados con motores de combustión interna con combustibles alternativos como GLP o gas natural y que no tengan emisiones de CO2 de más de 160 gramos por kilómetro.
También se podrán acoger vehículos comerciales de las mismas características que los anteriores, con las mismas emisiones de CO2, así como los turismos y comerciales con emisiones menores de 120 gramos de CO2 por kilómetro con calificación A, B, C o D.
Es necesario dar de baja definitiva en tráfico un vehículo de al menos diez años de antigüedad, en el caso de turismos, y de siete años, para los vehículos comerciales. El precio del coche a adquirir será de 25.000 euros, salvo para familias numerosas o discapacitados, que no podrá ser más de 30.000 euros.
El precio máximo de compra será de 40.000 euros para coches eléctricos puros, híbridos enchufables o de autonomía extendida y de 20.000 euros para turismos convencionales con calificación B y con emisiones de más de 120 gramos de CO2.
Fuente: diariodeavisos.com